La historia del día que defenzor envenenó a su familia

 Defenzorcita con lágrimas en los ojos: Papá, ¿me voy a morir?

 

Son las 10 de la noche del 24 de diciembre, Jane sirve la deliciosa cena que ha preparado para darle gusto a defenzor y alimentar a su familia. Están reunidos en el actual domicilio de DEP Ediciones (atrás quedaron Segundo Hogar y The Tree House), y los regalos que traiga el Niño Dios tienen a todos alerta, será una gran noche, es domingo aún.

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Mafedzilla esta en hombros de defenzor, están por pasar una calle, pero algo anda mal. Es martes 26 de diciembre, son las 2 de la tarde. defenzor baja a su hija pequeña y ella se vomita inmediatamente, vomita bastante, algo azul, parecen dulces. No se puede dejar a Terreneitor sola porque se come sus dulces de navidad. Vuelven a casa, una nueva vomitada en el camino, mientras defenzorcita y su abuelo, a.k.a Richard, entran a casa con algún tipo de afán.

Testigo de todo

defenzor se encarga de la enfermita, la cambia y la acuesta para consentirla, pero el vomito continua, ya no es azul. De repente defenzorcita corre al baño, vomita y llora. Algo esta pasando, ya no son los dulces navideños. El suegro de defenzor, entra al baño, algo le cayó mal también. 

Así comienzan las 4 horas con mayor descargas de retrete en la historia de Bogotá. En un error de comunicación y calculo navideño, defenzor ha servido de almuerzo una deliciosa ensalada rusa (papa con mayonesa) que quedó del 24. Todos han almorzado lo mismo y ahora una sinfonía de arcadas, se mezcla con los llantos y gritos de las niñas. defenzor no estudió medicina, pero caminó muchas veces por su facultad, y sabe que el vómito es contagioso (auditivamente), así que separa las niñas, y a defenzorcita le pone música alta y audífonos, la idea es que no se escuchen vomitar, el se mueve de un cuarto a otro corriendo mientras aprieta nalga, se aguanta el vomito como un campeón, pero ante la diarrea no puede hacer mucho.

El esfuerzo es enorme, ahora Richard hace fila detrás de defenzorcita en el baño, se turnan mientras defenzor está pendiente de TheTrueLittleJaneMetal. Ella, ya no tiene más para vomitar, ya solo quedan escalofríos y lágrimas, el siguiente camino es consentirla. Finalmente se queda dormida, y defenzor se concentra en su primogénita, ella llora desconsolada y le pregunta a su padre si se va a morir.

Defenzor con el corazón tan apretado como su trasero le responde: “Si hija, pero hoy no, cuando seas viejita”.

Mientras tanto Richard hace el combo diarrea vomito, y cuando para, descansa en cama, se queja del dolor de espalda, pero realmente no hay nadie pendiente de él. Defenzorcita después de un buen rato cae dormida y ya defenzor le pone cuidado a Richard, esta realmente mal. Ya había llegado el domicilio con los Pedialyte, así que todos tomaron de eso. Los baños han trabajado mucho, en un momento de espacio libre, defenzor los juaga, no quiere que las cosas empeoren. Sus arcadas son cada vez mas comunes, pero sabe que si abre esa llave, no se cierra nunca, pasa saliva, y todo lo demás.

Jane retorna de su trabajo muy preocupada, ha sido informada toda la tarde de lo que aconteció y la situación actual: Su esposo envenenó a su familia con la ensalada de papa navideña. Las niñas mejor, pero su padre, Richard casi abandonado. Ahora con su mamá en casa vuelven los llantos de las niñas, ya no hay vomito y parece que empiezan a mejorar. Pero Richard quiere irse al médico, él, que les tiene miedo a las agujas y no le gustan los hospitales, se siente tan mal, tan débil, que deciden entre todos, que Jane lo llevara en un taxi.

Lo alistan, defenzor le presta unos tenis y están listos para salir, el taxi ha llegado. Pero no puede caminar, esta muy débil, no puede ni siquiera llegar a la puerta. Defenzor baja a despachar el taxi, corre apretando. Los 3 mas enfermos siguen en cama, mucho Pedialyte y galletas Saltinas.

Richard se levanta, defenzor se lo encuentra en la puerta de la habitación y lo ayuda a llegar al baño, son 3 pasos, Jane esta pendiente. De repente Richard se desploma en la puerta del baño, sus piernas no responden más y cae encima de defenzor, Jane grita, esta totalmente ido, con las piernas mal dobladas y desmayado completamente. La situación es alarmante, Richard cumplió 74 y está operado del corazón hace 15 años, así que todas las malas ideas pasan por la cabeza de su hija y yerno en esos minutos, que parecen eternos. Por fin reacciona, defenzor lo levanta, van a la cama y lo acuestan nuevamente. Se reúnen afuera y tienen una charla agitada, la situación es mas grave de lo que creen, tienen miedo que esto empeore, es momento de pedir ayudar, lo tienen que resolver ya mismo.

Jane y Naaaah consiguen que un médico domiciliario visite a su padre, ha tardado solo una hora en ir. Regaña a todos por darle Pedialyte a un adulto, es insuficiente, Richard esta muy deshidratado y de allí su debilidad. Hay que llevarlo al hospital lo mas pronto posible para que lo hidraten, el medico da instrucciones de como Jane debe decir en la entrada, para un acceso rápido, mientras defenzor le sostiene las piernas hacia arriba según instrucciones del medico. Se le nota angustiado al doctor, los asusta a todos.

El doctor se va, Jane y defenzor empiezan a arreglar nuevamente a Richard para llevarlo al hospital. Las niñas están mejor, Mafedzilla duerme y defenzorcita está tranquila, le echara el ojo. Empiezan a bajar y defenzor los alcanza en el primer corredor, lleva el butaco. Richard se sienta y descansa cada 5 pasos. Es tarde en la noche y nadie en el conjunto se da cuenta. Ya llegando a la portería se pide el taxi, esperan afuera, Richard sentado en el butaco en la calle, una imagen que jamás defenzor pensó en ver. Se suben al taxi y se van, defenzor corre a ver a sus hijas que llevan un buen rato solas, siguen descansando, así que corre directo al baño, la descarga numero 235 del día, todo se vera reflejado en el recibo del servicio del agua del mes.

Pasan unas tres horas y están de regreso, Richard camina mucho más erguido y lo hace por su propio esfuerzo, le ha vuelto el alma al cuerpo a defenzor, es hora de descansar. Todos van a vivir al menos un día más.